sábado, enero 05, 2008

Madrigal, "Espacio Limpio y Natural Protegido"


Desde hace años nuestro pueblo y su entorno natural es un gran foco de atracción para el ecoturismo o turismo de naturaleza. Es una modalidad turística que implica el disfrute de los recursos naturales en estado relativamente original y en la
que el objetivo principal del viaje se relaciona directamente con la naturaleza. Los propios vecinos y los visitantes no podemos olvidar que el medio ambiente es un activo clave con exigencias de calidad para la revalorización de los recursos turísticos. El turismo debe mantener un equilibrio entre los intereses sociales o económicos y la conservación de los valores naturales y culturales. Es de vital importancia el respeto a la diversidad biológica, a los procesos ecológicos esenciales y a los sistemas de defensa de la vida natural. A esto se une el respeto a las tradiciones y a las costumbres locales.

La conservación y el desarrollo del medioambiente es un valor en alza para muchos turistas de los países europeos más desarrollados. Eligen entornos naturales bien conservados o espacios naturales protegidos. No basta la calidad del producto o un buen servicio. Hay que añadir la calidad ambiental para conseguir la plena satisfacción del cliente y su fidelización. Es de suma importancia la conservación del entorno y del patrimonio natural, arquitectónico, cultural y social. Somos unos privilegiados al poseer una diversidad de ecosistemas de alto valor ecológico o paisajístico. Algunos de nuestros recursos naturales y de nuestra fauna y flora silvestre se encuentran en peligro de extinción. Los propios madrigaleños debemos mantener una conducta responsable evitando la degradación, el deterioro del medioambiente y la suciedad de nuestro hábitat. La garganta de Alardos en época estival es un área ambientalmente muy sensible, singular, y un destino masivo turístico de frágil equilibrio que necesita una mayor y mejor conservación. Hay que potenciarla interna y externamente como "espacio limpio". La rentabilidad económica no puede ser la depredadora de la naturaleza. La conservación de la biodiversidad no es un freno al desarrollo sino el motor de éste.

El desarrollo turístico de la Vera con su patrimonio histórico artístico ambiental y sus valores paisajísticos debe integrarse adecuadamente en su entorno. Pero este desarrollo exige buenas vías de comunicación, plazas hoteleras de calidad y adecuadas campañas de promoción y respeto al medio ambiente. En los últimos años la oferta de alojamiento ha experimentado un importante crecimiento con algunas casas y hoteles rurales admirables tanto en su tipología constructiva con la rehabilitación de espacios degradados como en su deliciosa gastronomía con la potenciación de la cocina autóctona, de la que alguna semana escribiremos. Muestran una gestión de calidad en todas sus actvidades: acogidas, servicios, equipamientos, instalaciones, promoción y comercialización.

Queremos que Madrigal tenga un entorno natural bien conservado y que las autoridades locales conciencien del respeto a su hábitat como "Espacio Limpio y Natural Protegido" al margen de la calificación oficial o legislación que lo declare. Debemos legar a nuestros herederos un patrimonio natural, arquitectónico, cultural y social mejor que el recibido de nuestros mayores.