El nacionalista presidente del F.C. Barcelona ad infinitum et ad nauseam, Joan Laporta, ha calificado reiteradamente de imbécil al presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, aficionado barcelonista y gran culé. Tras el triplete de la pasada temporada, el imperialista dirigente del BarÇa enfrascado en sus delirios y obsesiones políticas independentistas se considera omnipotente, infalible e intocable. Los que discrepan de su gestión social son culpables, malvados y enemigos a muerte. O como decían los existencialistas franceses: los otros -no nacionalistas- son el infierno y la náusea.
El pasado 12 de agosto, miércoles canicular, el presidente de la Junta de Extremadura publicó el siguiente artículo en el diario Marca.
Querido president, amigo Jan. Hace meses tuviste el detalle de invitarme a presenciar el partido que nuestro Barça jugaba frente al Sporting de Lisboa en Portugal. Al empezar nos congratulamos por la cantidad de aficionados que cantaban el himno. Delante de ellos, dos banderas. Una, la del Barça, la otra, la de Extremadura. Eran cientos de aficionados venidos de nuestra Comunidad porque jugaba su equipo.
En nombre de ellos y de tantos otros culés repartidos fuera de Cataluña, te pido que no lo olvides nunca. El Barça para nosotros también es mes que un club, es un sentimiento, una emoción, parte de nuestras vidas. Por eso somos culés, a pesar de que a veces no podamos entender ciertos mensajes excluyentes en un mundo que pierde sus fronteras y que en el fútbol las perdió hace tiempo.
La gente azulgrana sabemos lo que el Barça representa para Cataluña. No solamente lo sabemos, lo apreciamos. El Barça es de las mejores cosas que nos ha pasado. Por eso te ruego que cuando hables como presidente del Barça lo hagas sabiendo que nos representas a todos. Y no nos hagas daño. Porque el día que el Barça deje de ser tan universal como es, los que viven en la Diagonal, tendrán sólo un equipo de fútbol.
Estás siendo un excepcional presidente. Nos has hecho vivir momentos inolvidables. Pero, por favor te pido, no nos hagas daño. Seguiremos siendo del Barça, simplemente que con algunas heridas por sentirnos excluidos en los sentimientos del presidente. Con el afecto de siempre. Tus éxitos son los de todos. Visca el Barça y Visca Catalunya. Viva España también, si me lo permites. O aunque no me lo permitas.
Recientemente se ha conocido, que el viernes 14 de agosto, el Presidente extremeño recibió una llamada telefónica de Laporta, en su móvil personal, en la que desquiciado y sin control, le insultaba repetidamente con el calificativo de ¡Imbécil! Olvídate de pedir nada al Barça y no vuelvas a hablarme en tu vida. Que te quede claro que continuaré siendo presidente del Barça a pesar de ti y de todos los que queréis hundirme. Para terminar, antes de colgarle el teléfono, con ¡Visca Catalunya Terra Lliure!.
El Presidente de la Junta de Extremadura ha confirmado a sus personas más íntimas que es el incidente más desagradable que le ha tocado vivir en su vida política. En declaraciones a Onda Cero, Fernández Vara ha confirmado que la conversación que desveló El Mundo era cierta. Y manifestó, además, que cuando recibió la llamada pensó que era una "broma" de la radio. Cuando me di cuenta que era él le pedí que retirase lo dicho, pero no lo hizo y corté la conversación, detalló.
Tras filtrarse a los medios el contenido de la conversación que ambos mantuvieron, Laporta le ha respondido, ayer sábado, en el aeropuerto de El Prat tras su regreso de un viaje a Argentina, en el que estaba acompañado por su director general, Joan Oliver, implicado en el caso de espionaje a los vicepresidentes del Club. Parece que Fernández Vara quiera hacerse publicidad a mi costa. Que se preocupe más de los problemas de los extremeños.
Una persona que se precie, un catalán con seny que es algo más que sentido común porque apunta hacia el buen criterio, el buen juicio, no puede perder de esa forma las buenas costumbres, los buenos modales. Con su política independentista y de exclusión está haciendo grave daño a los numerosos socios y seguidores fuera de Cataluña. Y bien que lo siento por los buenos amigos y familiares extremeños que ponen sus esperanzas, sueños e ideales deportivos en el BarÇa sin verse correspondidos por su Presidente que les considera socios y aficionados de segunda categoría. Si Laporta quiere dedicarse a la política activa que deje el Club y se presente a las elecciones pero que no utilice éste para la promoción de su nacionalismo infantil, desfasado y excluyente. No le faltaba razón a Jorge Valdano cuando manifestó que el Barcelona mira desde Cataluña hacia dentro, y el Real Madrid desde España hacia fuera. Queridos barcelonistas extremeños y de cualquier lugar del mundo. En la "Casa Blanca" os ofrecemos, alegría, paz, seguridad, felicidad, seréis aficionados de primera categoría, como parte esencial de un todo, no os sentiréis excluidos de los sentimientos del presidente y los éxitos serán de todos.
