sábado, noviembre 22, 2008

La cópula de Zapatero y Barceló


Zapatero y Barceló, íntimos amigos de la cofradía de la ceja pronunciada, llevaban tiempo copulando en un éxtasis arrebatador y han parido tras nueve meses de embarazo, entre septiembre 2007 a junio de 2008, en la sede de la ONU en Ginebra, una niña voluminosa, robusta, de gran altura, con ojos policromados color chillón y rostro calcáreo a la que han denominado Sala de los Derechos Humanos y Alianza de Civilizaciones. Una orgía de placer, la cópula o "el polvo" más caro de la historia. Adan y Eva, Nerón y Popea, Marco Antonio y Cleopatra, Pilatos y Procla, Romeo y Julieta, Napoleón y Josefina eran unos aprendices a su lado. Barceló, el altruista, ha recibido 6 millones de euros de su íntimo para poder dar a luz una niña tan deslumbrante. La niña rica ha llegado al mundo en tiempos de austeridad y de grave crisis para muchos. Pero ¡qué importa! es una hija política. Ha sido un parto difícil pero de forma natural y con una herencia de 20 millones de euros para ayuda a su desarrollo. Los niños famélicos han aportado 500.000 euros para que el fruto fuera bien concebido. Para algunos, la niña es de una belleza impresionante, para otros es vulgar y fea. Los que la conocen sólo por fotos dicen que tiene muy buena pinta. Algún amigo muy próximo a la familia la ha descrito como la belleza más original del siglo XXI. Demasiado autobombo.

Sus progenitores dicen que será educada en el respeto a los derechos humano, en el multilateralismo y en la defensa de la paz. Su presentación en sociedad ha tenido un gran realce y se ha realizado ante 700 invitados. Destacaba la asistencia del rey de España que señaló su indudable belleza y su fuerza expresiva, del secretario de la ONU, de los engendradores de la criatura, uno de ellos dijo que su belleza es reflejo de la España actual, que tendrá gran energía y confianza en sí misma, y del ministro español de Asuntos Exteriores y Cooperación, padrino de la recién nacida y autor del regalo más práctico: dinero de ayuda humanitaria. Con toda la transparencia pública, luz y taquígrafos y conocimiento de la sociedad civil, como es costumbre, y con la preocupación por el desarrollo integral y humano de los pueblos pobres. También asistió el primer ministro turco, palmero de Alianza de Civilizaciones. Todos los invitados miraban maravillados a la criatura. Olía muy bien. Había sido bañada en agua pura y espuma blanca. No obstante, el autor del parto no estaba del todo cómodo con los calificativos y afirmaciones sobre el costo de la cópula. Incluso en algún momento expresó: ¡Por favor! ¡Un poco de verguenza! Cuando se dijo que era la mayor belleza del siglo XXI. Sin embargo en algún momento manifestó que la criatura era de ciencia ficción.

Decía Antonio Cánovas del Castillo que no hay más alianzas que las que trazan los intereses, ni las habrá jamás.