sábado, junio 28, 2008

Arte



El "Divino" Luis de Morales

La actividad artística de este excelente pintor extremeño se desarrolla a lo largo del siglo XVI. En 1549 se dice de él:"Tiene fama del mayor e mejor pintor del Reino e sus obras por tales son tenidas". El beneficiado Alonso de Montesinos expresaba lo siguiente: "Eçede en su obra a todos los ofiçiales de España e yguala a los mejores de Flandes e Ytalia". El sobrenombre de Divino se debe al cordobés Antonio Palomino, pintor de cámara de Carlos II y Felipe V que escribió una biografía sobre él. Fue un pintor de gran sensibilidad que expresó como nadie los movimientos espirituales de la época: el drama de la Cruz y la Pasión, aunque Francisco Pacheco, suegro de Velázquez, dice que era un pintor dulzón y almibarado. La fecha del nacimiento y muerte del pintor siguen siendo una incógnita. En diciembre de 1584 declara en un documento público que tiene una edad de 73 ó 74 años lo que significa que nació en 1510 ó 1511 y Palomino afirma que murió en en 1586 a los 77 años de edad. Tampoco se conoce su lugar de nacimiento aunque se sabe con certeza que en 1539 tenía ya un taller abierto en Badajoz donde tenía un nutrido plantel de oficiales. Estaba casado con Leonor de Chaves, dama pacense, y tuvo siete hijos, tres varones y cuatro hembras. Para algunos especialistas, su vida y su obra sigue envuelta en un misterio y para otros, hay un considerable número de interrogantes no resueltos o su vida y su obra no han sido todavía bien estudiadas.

La primera obra del pintor, la Virgen del Pajarito, está fechada en 1546 y actualmente se encuentra en la iglesia de San Agustín en Madrid. En 1800, Ceán Bermúdez facilita una relación de las ciudades que en esa época tenían obras de Luis de Morales: Toledo, Madrid, Sevilla, Valladolid, Ávila, Burgos, Granada, Higuera la Real, Arroyo de la Luz, Alcántara y Badajoz. El retablo de la Iglesia de la Asunción de Arroyo de la Luz lo realiza en 1563, una de sus obras más conocidas. Realizó múltiples encargos para el obispo de Badajoz, Juan de Ribera. Su obra, principalmente religiosa, está poblada de Piedades y Eccehomos. Hizo algún retrato de su protector Juan de Ribera, que se encuentra en el Museo del Prado. Destacan sus series del Evangelio de la Infancia colocadas en varios retablos y sus delicadas Vírgenes de la leche o sus Vírgenes del sombrero. Como artista religioso, su pintura se entronca en la mejor tradición hispanoflamenca. Expresó mejor que nadie las vivencias profundas de su sociedad. Sus últimos años fueron difíciles. Terminó pobre, enfermo y agotado cuando Felipe II le visitó en Badajoz en 1581.